Hace algunos años, una colega me habló sobre el libro de Robert Fulghum, All I Really Need To Know I Learned in
Kindergarten. Este libro fue publicado
por primera vez en 1988. El autor tiene su website y ha escrito varios libros
basados en sus experiencias; las dos últimas publicaciones han sido catalogadas
como novelas.
Me enamoré de la propuesta que realiza el autor en sus 16 exhortaciones
para vivir acorde con lo aprendido (si lo fue) en nuestra primera experiencia
escolar. En este momento las comparto porque me parecen muy pertinentes ante lo
que nos ha tocado vivir este 2020. Las cito:
1. Share everything.
2. Play fair.
3. Don’t hit people.
4. Put things back where you found them.
5. CLEAN UP YOUR OWN MESS.
6. Don’t take things that aren’t yours.
7. Say you’re SORRY when you HURT somebody.
8. Wash your hands before you eat.
9. Flush.
10. Warm cookies and cold milk are good for you.
11. Live a balanced life – learn some and drink some and draw some and paint
some and sing and dance and play and work everyday some.
12. Take a nap every afternoon.
13. When you go out into the world, watch out for traffic, hold hands, and
stick together.
14. Be aware of wonder. Remember the little seed in the Styrofoam cup: The
roots go down and the plant goes up and nobody really knows how or why, but we
are all like that.
15. Goldfish and hamster and white mice and even the little seed in the
Styrofoam cup – they all die. So do we.
16. And then remember the Dick-and-Jane books and the first word you learned –
the biggest word of all – LOOK.”
Fulghum, Robert. Everything I Ever Really
Needed to Know I Learned in Kindergarten. Press of Ward Schori, 1988.
En palabras sencillas nos expone al recuerdo de reglas básicas para la
convivencia humana. Cada una encierra un conocimiento profundo que se nos hace
difícil poner en práctica, pero si lo hiciéramos, ¡el mundo sería un mejor
lugar para nuestra existencia!
“Share everything”. Con esta acción abandonaremos el egoísmo que aflora
desde que tenemos conciencia. Lo más interesante de todo es que lo que puede
ser compartido sin medida es aquello que no nos cuesta, como puede ser una
sonrisa, unas palabras de aliento o un simple abrazo. Para el que los recibe
puede representar lo más preciado en ese momento.
“Play fair”. Cuando somos honestos, practicamos lo justo. Dormimos
tranquilos y aprendemos a manejar las sorpresas que nos da la vida.
“Don’t hit people”. No solamente no golpear o herir, tampoco
menospreciar. Aunque sea nuestro enemigo, tiene las mismas fortalezas y
debilidades que compartimos como humanos. Al final si no lo hacemos, perderemos
más nosotros; tal vez el arrepentimiento llegue muy tarde. Si somos nosotros
las víctimas de otros, devolvamos solo amor y comprensión; eso posiblemente
desconcertará a quien nos ataca.
“Put things back where you found
them”. Evitaremos los desastres que ocasiona el desorden y
crearemos el espacio necesario para lo nuevo que debe llegar a nuestras vidas. Seremos
considerados con los demás y nuestro legado será respetado y honrado.
“Clean up your own mess”. No existe razón para que otro venga a recoger nuestro desastre. Lo único
que lo justifica es nuestra cobardía. Asumamos la responsabilidad de nuestras
acciones, así ganaremos el respeto de los demás.
“Don’t take things that aren’t
yours”. Nos permite tener nuestra conciencia tranquila, en
paz. No permite el sobresalto que ocasiona el engaño y la mentira. Vivamos
según nuestros medios y capacidad, sin tomar lo que no nos pertenece.
“Say you’re SORRY when you HURT
somebody”. La humildad y el perdón se demuestran cuando pedimos
disculpas. Alivia la carga del corazón y el alma.
“Wash your hands before you eat”. Parece simple, pero su importancia es
vital. Las prácticas de una buena higiene previenen enfermedades y epidemias, a
veces nos olvidamos de esto. Cuando no estamos saludables, todo nuestro sistema
y ánimo se afectan y la felicidad se ausenta. Por consiguiente, afectamos a los
demás. ¿Qué más evidencia que los nos ha tocado vivir en este año 2020?
“Flush”. Descárgate, en todos los aspectos. Llora, ríe, baila y canta un
poco cada día. Cuando descargamos, se aliviana nuestra existencia y recargamos
baterías.
“Warm cookies and cold milk are good for you”. Tomate un receso, un café con un amigo o una copa de buen vino, es
necesario para renovar nuestros sentidos y despejar ofuscaciones.
“Live a balanced life – learn some and drink some and draw some and paint some
and sing and dance and play and work every day some”. Distribuye tu tiempo en un balance perfecto: tú, familia, amigos,
trabajo. Ese debe ser el orden ideal. Si no te cuidas tú primero, el resto jamás
lo podrás lograr.
“Take a nap every afternoon”. – Era una práctica de nuestros antepasados. El descanso renueva
nuestra energía.
“When you go out into the world, watch out for traffic, hold hands, and stick
together”. Probado está que la vida es mas llevadera cuando
unimos todo: esfuerzos, alegrías, tristezas y metas.
“Be
aware of wonder. Remember the little seed in the Styrofoam cup: The roots go
down and the plant goes up and nobody really knows how or why, but we are all
like that”. No te deslumbres ante todo lo que brilla. Busca siempre la esencia que provoca ese brillo. Tal vez encuentres
autenticidad o el más absoluto vacío.
“Goldfish
and hamster and white mice and even the little seed in the Styrofoam cup – they
all die. So do we”. ¡Ahhhh!, nuestra mortalidad. ¡Cuántas veces nos olvidamos de ella! Solo ante las sacudidas de la vida,
acude a nuestra corta memoria.
“And then remember the Dick-and-Jane books and the first word you learned – the
biggest word of all – LOOK”. Mira, observa, percibe todo
lo que nos rodea. Es lo que hace significativa nuestra vida.
Entendí necesario compartir en estos momentos esta
sencilla reflexión. Espero que sirva para todos los que necesitan recordar los
aspectos sencillos que deben tenerse presentes en la vida.