Libera

 Abrí la puerta a mis demonios, 
 me di cuenta de la necesidad, 
 me sirven para mantener mi sensibilidad latente, 
 viva hasta el final.
  
 Quien no quiere sufrir, que no nazca,
 La vida se trata de padecer,
 sentir que no podemos,
 para salir a encontrar las posibilidades.
  
 Hay que romper la burbuja que nos colocan,
 para darse cuenta de que el ego ya no nos domina más. 

In consciencia

 Escucho esa voz, altisonante, deseosa de ser escuchada.
 Lo que no sabe es que interrumpe, que no es invitada.
  
 No descifro lo que quiere,
 poco importa sobre este vivir,
 los que le rodean, denle confort, 
 a ver si así calma su devenir.
  
 No le perdono su interrupción, no.
 Se cuela, desgarra, corta en pedazos la vivencia.
 No conoce a Silvio, ni a la Flores y menos a mí.
  
 Permitámosle sólo esta noche que su voz quede aquí.
 Ya mañana se apagará y esperará un nuevo candil, tema, motivo o ardid,
 que le apaciguará sus ganas de sobresalir.